Origen de Sinaloa:
Descubrimiento y conquista:
El descubrimiento y conquista de
Sinaloa por los españoles no se realizó en una sola expedición, como la de
Anáhuac, sino en varias expediciones.
La primera expedición, que se
hizo por tierra, fue mandada por Nuño Beltrán de Guzmán, presidente de la Real
Audiencia de México. Este hombre emprendedor, a la cabeza de 400 españoles, más
de 8,000 indios auxiliares y muchos de carga, salió de México a fines del año
de 1529, y después de haber conquistado la Nueva Galicia, hoy estado de Jalisco,
se dirigió más al norte hasta encontrar las ricas minas de oro y plata y las
grandes ciudades que se decía haber en estas regiones.
A principios de 1531 Nuño Beltrán
de Guzmán entró a Chametla, habiendo derrotado el día anterior a los indios que
le opusieron resistencia en el Llano de las Vacas, y le pidieron después la
paz. De Chametla salió para la provincia de Culiacán, pasando por Piaxtla, por
el pueblo de la Sal — probablemente las Salinas de Ceuta— y el pueblo de Baila.
En todo el tránsito se libraban
combates y escaramuzas que terminaban por la derrota de los naturales, y en
todas partes se quemaban sus caseríos por los bárbaros conquistadores. En
algunas poblaciones, especialmente a orillas del río Ciguatán, hoy San Lorenzo,
los españoles solo hallaron mujeres, lo que dio paso a la creencia de que
estaban habitadas por amazonas; pero tal circunstancia era debido a que los
varones andaban fuera, pensando en dar guerra a los invasores.
Refiere el padre fray Antonio
Tello que, al llegar a Oso la expedición, fue recibida en paz por el Señor del
pueblo y diez mil indios, que los fueron acompañando hasta Navito, Guzmán
determinó fundar allí una villa con el título de San Miguel de Navito, pero que
en el mismo año fue trasladada a Culiacán, que es donde hoy permanece. De
Navito, continuando para Culiacán, pasaron los españoles por el pueblo de
Quilá, que incendiaron después del combate.
Nuño Beltrán de Guzmán
expedicionó en seguida por la costa, los pueblos de las Vegas y el Vizcaíno, y
después por la sierra de Capirato; y a su regreso fundó con cien españoles la
villa de San Miguel de Culiacán, en la margen izquierda del río de Orabá (hoy
río Tamazula) y enfrente de la punta del mismo con el de Humaya, como tres
leguas arriba de la antigua y misteriosa ciudad azteca, de la que no queda más
vestigio que el nombre diminutivo del pueblo donde pudo estar ubicada.
Almíndez Chirinos, otro capitán
español, expedicionó por el norte, derrotó a los indios que le opusieron
resistencia en los ríos de Mocorito y Sinaloa, y bajó a Tamazula, donde tuvo
noticia que en esa costa había sido muerto, con todos sus compañeros, Diego
Hurtado de Mendoza, jefe de la expedición que por mar había enviado Hernán
Cortés en pos de nuevos descubrimientos.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario